En un mundo que nos empuja a seguir caminos predecibles, el pensamiento lateral nos invita a mirar hacia los lados, romper esquemas y descubrir nuevas formas de entendernos y crecer.
¿Qué es el pensamiento lateral?
Es una forma de pensar que busca soluciones creativas y no convencionales. En vez de seguir una lógica paso a paso (pensamiento vertical), el pensamiento lateral explora caminos alternativos, hace preguntas diferentes y conecta ideas que parecen no tener relación.
¿Cómo ayuda en el desarrollo personal?
- Rompe creencias limitantes: Nos permite cuestionar lo que damos por hecho y abrirnos a nuevas posibilidades.
- Activa la creatividad: Nos ayuda a encontrar soluciones originales en momentos de bloqueo.
- Fomenta la flexibilidad mental: Entrena nuestra mente para adaptarse y ver los problemas desde distintos ángulos.
- Profundiza el autoconocimiento: Al pensar diferente, descubrimos aspectos de nosotros que estaban ocultos o reprimidos.
Ejercicios prácticos para entrenar el pensamiento lateral
Aquí tienes algunos ejercicios sencillos que puedes usar para activar tu creatividad y conocerte mejor:
- Cambia el enfoque
Cuando tengas un problema, pregúntate:
¿Qué pasaría si lo veo al revés?
¿Qué haría alguien completamente diferente a mí?
Por ejemplo: Si siempre resuelves conflictos hablando, imagina cómo lo harías si no pudieras usar palabras.
- Haz preguntas raras
Plantea preguntas que no tengan una lógica directa.
¿Por qué las camisas tienen botones?
¿Qué pasaría si los árboles hablaran?
Estas preguntas activan zonas creativas del cerebro y te ayudan a pensar fuera de lo común.
- Ejercicio del globo
Pregunta: ¿Cómo puedes pinchar un globo sin que se escape el aire ni haga ruido?
Respuesta: Pinchándolo cuando está desinflado.
Este tipo de acertijos te obliga a salir del pensamiento lógico y buscar soluciones inesperadas.
- El hombre del ascensor
Un hombre vive en el décimo piso. Cada día baja en ascensor, pero al volver solo sube hasta el séptimo y luego usa las escaleras. ¿Por qué?
Porque es bajito y no alcanza el botón del décimo piso.
Aplicación en el autoconocimiento
Puedes usar el pensamiento lateral para explorar tu propósito, tus emociones o tus decisiones.
Por ejemplo:
- Si no sabes qué te apasiona, en vez de preguntarte ¿Qué me gusta hacer?, prueba con ¿Qué haría si no tuviera miedo al fracaso?
- Si estás bloqueada emocionalmente, en vez de buscar la causa directa, pregúntate ¿Qué parte de mí está intentando protegerme?